Después de un Día 1 en el que se disputaron 14 niveles de 45 minutos, hoy volvemos a la acción para vivir la jornada final del primer High Roller de la historia moderna del Campeonato de España de Poker, un torneo que en su primer día de competición registró un total de 70 entradas.
De todos ellos, solo 21 han conseguido superar el corte y ya han tomado asiento para iniciar la pelea por colarse en el dinero, algo que solo lograran 9 jugadores.
Por el momento, el que más ventaja tiene para conseguirlo es Melle Potters, un habitual de los torneos de Casino Barcelona que ayer fue el único capaz de superar la barrera de los 200.000 puntos (219.500). Sin embargo, no ha sido el holandés el jugador más destacado en este inicio de jornada.
El primero en mover ficha fue Albert Flores, que llegaba a esta jornada con el peor stack de todos los supervivientes: 35.000 puntos. Eso le llevó a moverse all in cuando la mano le llegaba limpia al cutoff. En la ciega grande, Sergi Escoté se tomaba algo de tiempo para pensar, pero terminaba pagando para poner a Flores en riesgo.
Sergi Escoté: 
Flores: 
El board traía 
y Flores lograba doblar su stack, lo que le coloca por encima de jugadores como el propio Escoté.
Algo peor le fue a Robert Escribano, que se dejaba gran parte del stack en una mano contra José Marqués. Ambos llegaban al river de un board que mostraba 
y ahí terminaban con todo el plástico dentro. Escribano mostraba 
para pareja de treses, pero eso no era suficiente para superar al 
de Marques, que había flopeado escalera.
Con un stack bastante mermado, Escribano aún tuvo tiempo de destrozar a Jaime Rueda con 
contra 
en una mano en la que dejó al de San Martín de Toranzo con tan solo tres ciegas. Poco después, esas ciegas se iban al centro sin éxito y Ruda se convertía en uno de los primeros eliminados del día 2.
